Bueno pues ayer salimos de Pasto como a las 9 de la mañana cuando pasó una pareja de amigos que viven ahí y junto con otro amigo argentino nos encaminaron hacia la frontera. Nos detuvimos a desayunar después de 40 km y continuamos a Ipales, última ciudad colombiana antes de la frontera del puente Rumichaca.
Los trámites de salida de Colombia y de entrada a Ecuador son bastante sencillos y rápidos, solo tuvimos que pagar 6 dólares del seguro de cada moto en Ecuador. La superficie de las carreteras de ecuador, aunque muy curveadas por lo montañoso está en excelentes condiciones la mayor parte y pudimos ir a mas velocidad que en las carretera colombinas en las que se maneja a velocidad de tractomula, o sea a 40 o 50 km/h por el intenso tráfico y el trazo tan antiguo de las carreteras. Acá en Ecuador no hay tanta motito, tanto tractomula y es mucho mas fácil rebasar, lo único malo es que si se paga peaje en todas las carreteras, no mucho 20 centavos de dolar en cada caseta.
Así llegamos a Ibarra, donde comimos, cargamos gas y vimos el nevado Cayambé. Seguimos tratando de aprovechar hasta el último rayo de sol que nos abandonó a 30 km de Quito, precisamente donde la carretera esta en construcción todavía, en fin, llegamos a Quito y después de dar varias vueltas alrededor
del hostal San Gabriel dimos con el y ya pudimos descansar.
Hoy dejamos descansando las motos y fuimos primero a dejar la ropa a una lavandería cercana y después tomamos el metrobús de aquí para ir al centro histórico, dimos un paseo en el turibús, comimos y ya al anochecer, ya cuando comienza a hacer frío llegamos al hostal.
Mañana, aprovechando lo barato y cómodo de este hostal (9 usd por persona por noche) nos quedaremos todavía e iremos al Pueblo de la Mitad del Mundo, o sea para tomarnos fotos en la línea del ecuador y después otra vez al centro a ver que museo visitamos porque hoy lunes cierran aquí.
Volcán Pichincha