En Montenegro después de buscarle un rato encontramos el Parque Nacional del Café, que tiene el Museo del Café y un área de diversiones.
Después de desayunar entramos al Museo, muy interesante ya que este es el principal producto agrícola de exportación legal y hay toda una cultura y tradición muy arraigada basada en su producción y consumo. Saliendo del museo recorrimos el Sendero del Café que va bajando hacia el área de juegos tipo six flags, pasando por pequeños cafetales de diferentes variedades, para regresar al estacionamiento nos subimos al teleférico que lleva al área del museo.
Continuamos por este camino de las fincas hasta salir a la carretera que lleva a Cali, a donde llegamos como a las 16:30, entramos por una parte muy fea de la ciudad directo al centro, lo cruzamos para llegar al Barrio de San Antonio, que es la parte más antigua de la ciudad donde esperábamos encontrar hospedaje, ahi anduvimos cuando Lisette se comunicó con su amigo Cesar, mexicano que vive ahí en Cali
y nos ofreció su casa, arrancamos para llegar a verlo en un centro comercial al sur de Cali- llegamos a su casa nos tocó jacuzi, comimos en su terraza y a dormir.
Hoy en la mañana después de desayunar Cesar, su esposa y su pequeño hijo nos escoltaron hasta la salida de la ciudad hacia Popayan, nos despedimos en una gasolinería y arrancamos.
Hasta Popayán la carretera está muy bien pero de ahí a Pasto, aunque es muy espectacular por que nos adentramos en una parte de los Andes Colombianos, la carretera tiene tramos muy maltratados, donde nos convencemos de que traer motos doble propósito es lo mejor. También del calor intenso de hasta 38° de las jornadas anteriores ahora subimos y sentimos el aire frío de la montaña, esto nos hace valorar mas las chamarras IXS donadas por el tocayo de MOTOHOUSE para este viaje, en el calor intenso con la ventilación que tienen y rodando no hay problema y en el frío nos llevan confortablemente, gracias tocayo.
Los paisajes son impresionantes, grandes montañas y profundas cañadas. Así llegamos a Pasto, en un entorno que nos recuerda algunas zonas montañosas del Estado de México, estamos al pié de un gran volcán, el Galeras que algo de tiene actividad, aunque no lo pudimos ver por que está nublado.
Mañana entraremos a Ecuador y esperamos llegar a Quito.
CAFÉ CON AROMA SUBVERSIVO